Sufres de una herida crónica y nadie más que tú entiende el peso que tienes que cargar y todo lo que conlleva, afectando a tu vida diaria. Pero ahora has decidido tomar las riendas de tu vida, dar un giro que te permita integrarte a lo que hacías antes, sin miedo, sin pena, ¡con decisión!
Sabes que tu herida es crónica porque no ha sanado en más de seis semanas; o quizá ha cicatrizado, pero en repetidas ocasiones se vuelve a abrir, sin llegar a curarse.
Necesitas la solución definitiva a tu problema, para que la herida sane sin llegar a medidas drásticas, que puedas retomar tu vida, disfrutar con familiares y amigos como lo hacías normalmente.
El primer paso para retomar tu vida e integrarse a la sociedad es la información. Conocer lo necesario acerca de tu herida crónica y todos sus síntomas es lo que te ayudará a entender porqué no cierra, la razón de que salga líquido de ella o porqué huele mal.
Entendiendo la naturaleza de la herida, se entiende que ya no es necesario tratarla como se haría con cualquier herida normal; sino que necesita que la atiendan especialistas que puedan orientarte y capacitarte en el tema, sobre todo para conocer qué provoca que no cierre, desde:
Así ya sabrás que no solo se debe cuidar la herida con cremas, geles u otros métodos de curación; es necesario tener la asesoría adecuada para conocer si se está curando la herida de manera correcta, si necesitas medicamentos especiales o si necesitarás ayuda de algún familiar para hacerlo desde tu casa.
Es mejor conocer lo que necesitas para favorecer que tu herida sane correctamente, lo que se necesita para dejar atrás la pena e integrarte a tu día a día normal. Es mejor buscar especialistas en heridas crónicas que tengan varias respuestas ante tu problema.
Necesitas personal con experiencia, con avanzado y amplio conocimiento sobre heridas para que puedas volver a tus actividades favoritas, con la seguridad de que se tratará el problema de manera efectiva.
En Medicina Integrada en Diabetes y Heridas Crónicas (MIDHEC) puedes encontrar la ayuda que estás buscando.
Recupera tu vida con atención y seguimiento adecuado.
No solo atenderemos tu herida de la mejor manera posible, con empatía, calidez y de cerca, sino que te ayudarán a retomar tu vida junto a tus familiares, pensando en tu bienestar antes que otra cosa, aumentando tu calidad de vida, con opciones para que puedas cuidarte, vivas sin pena y preocupaciones.
Estarás en buenas manos con un conjunto de especialistas que te atendemos, tratamos y rehabilitamos de estas enfermedades, con un programa de atención y seguimiento adecuado para ti. MIDHEC busca que sus pacientes se sientan cómodos, para que no tengan que sufrir la ansiedad que genera ir al médico.
¿Tienes hábitos de tu día a día que quieres conservar? ¿Metas que alcanzar? Los médicos especializados de MIDHEC te darán un tratamiento basado en evidencia clínica, pero siempre tomando en cuenta tus preferencias, en función de lo que quieres lograr a futuro.
El acompañamiento continuo que MIDHEC ofrece, abarca atención personalizada y enfocada en tus necesidades.
La visita al médico es de lo más difícil a lo que puedes enfrentarte por un torrente de dudas como: ¿Y si tiene que amputarme? ¿Si tengo que dejar de hacer ejercicio? ¿Viviré con este problema cuánto tiempo?
Una ventaja que la medicina integrada ofrece para despejar dudas y que puedas retomar tu vida, es que tu enfermedad será abordada de tal forma que puedas afrontar el problema desde tu alimentación, las emociones y actividades físicas; garantizando que retomarás tu vida normalmente y reestablecerás tu salud.
También existe la posibilidad del salvamento de extremidades, después de una adecuada valoración, para evitar la amputación. ¡No es la única solución y tienes alternativas!
Todo el proceso al tratar con tu herida crónica será acompañándote de tu familia, para que ambos lados aprendan a vivir durante este proceso y lo entiendan, con una buena estabilidad física, mental y emocional, para reintegrarte a la sociedad sin pena.
¡Toma el control de tu salud!
Con estas opciones y valoraciones es posible deshacerse de la vergüenza, siendo el primer paso para retomar las riendas de tu vida, volver a realizar ese deporte que tanto te gusta o salir a disfrutar con tus amigos como solías hacerlo.
Existen soluciones para tu problema, no permitas que te quite el control de tu vida y tu felicidad. ¡Hay esperanza!
